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Director: Juan Manuel LLenque LL.

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Un castigo que lleva a la muerte

Febrero 01, 2014
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Es increíble y muchas veces irracional, ver el comportamiento violento, al que  muchas personas pueden llegar, amparados en tomar justicia o recurrir a la frase “corrección de comportamiento”, y más aun, cuando están organizados en grupos, y muestra de ello es el lamentable hecho que sucedió en la provincia de Otuzco, durante estos días, en donde una sexagenaria mujer fue asesinada a golpes, por una ronda campesina,  tras ser culpada de haber asesinado a su propio hijo con MAGIA NEGRA.
 
En sólo lo que va del año, los ronderos y sus severos castigos han sido parte de las principales noticias en nuestro país, no siendo el  único caso en donde estas mismas personas, que si bien combaten los principales vicios inmorales de una sociedad, y castigan los delitos; lo hacen de una manera no solamente ancestral, sino que han implantado su propia condena a muerte contra quienes encuentran culpables de un delito. Las rondas campesinas están para infundir respeto a la moral, a la patria, pero también para fomentar la paz y dar el ejemplo de una buena convivencia social.
 
En muchos de estos casos, la población es más fuerte que la misma justicia de nuestro país, por lo cual se deben tomar medidas adecuadas y urgentes, que no permitan que las rondas campesinas actúen de una manera tan desnaturalizada y tan extremista, como lo vienen haciendo en sus propios poblados, es ahora en donde el límite de su participación debe discutirse, esto no es una costumbre, es el trato a la vidas humanas, a la dignidad del hombre, que está amparada por decretos universales, y en donde la autoridad reconocida por todo el pueblo debe también iniciar procesos judiciales a las rondas campesinas y sus líderes, que si bien hacen un gran trabajo contra la delincuencia, resulta en muchas ocasiones muy extremista de su parte, e ilegal.
 
Debemos dejar de lado la costumbre, la idiosincrasia, el temor, la severidad sangrienta con el que se hace justicia, y con el cual debemos corregir el castigo inhumano en el que muchas rondas están cayendo, sin duda el tema de las rondas vuelve a ser tapete de discusión, no sólo porque han asesinado a una personas, sino porque muchas veces están cayendo en la ilegalidad, y así no se garantiza su buen funcionamiento.
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Una publicación de JM COMUNICACIONES